jueves, 16 de abril de 2015

Andalucía: algunos partidos siguen sin enterarse

Hoy se celebra la sesión constitutiva del Parlamento de Andalucía. Casi un mes después de los comicios del 22-M, tras dos rondas de contactos con los partidos políticos que han obtenido representación en el Parlamento de Andalucía y después de haber dado audiencia a los agentes sociales y económicos de la Comunidad, la investidura de Susana Díaz -la clara vencedora de las elecciones andaluzas- sigue sin reunir los apoyos necesarios para resultar elegida presidenta.

En Andalucía y en el resto del país se ha hablado mucho en los últimos meses de la llegada de un nuevo tiempo político en el que las mayorías absolutas dejarían paso al acuerdo y al pacto. Pero viendo lo que ocurre en Andalucía bien podría afirmarse que nada ha cambiado y que algunos partidos continúan sacrificando el interés general frente al de partido, siguen sin mostrar voluntad de acuerdo y consenso y siguen sin poner en primer término la opinión de la ciudadanía.

En un Parlamento de Andalucía marcado por la ausencia de mayoría absoluta, y en el contexto actual de hartazgo y desafección, la voluntad de diálogo y acuerdo de los partidos políticos debiera de ser inquebrantable. Sin embargo, ante la inminencia de las elecciones municipales del 24-M, las estrategias se están definiendo en clave partidaria, más que de interés general.

Susana Díaz fue la clara vencedora de las elecciones andaluzas. No hay ninguna duda al respecto. Si la líder del PSOE llega a las municipales del 24-M habiendo sido investida presidenta sin resistencia y con las instituciones de gobierno de la Comunidad funcionando con normalidad, pese a no disponer de mayoría absoluta en el Parlamento Andaluz, su talla política crecería aún más. Esto es precisamente lo que PP, Podemos y Ciudadanos intentan evitar a toda costa. De ahí que, con independencia de lo expresado por los andaluces en las urnas, estén retrasando deliberadamente la investidura de Susana Díaz con el único propósito de desgastar la imagen de la líder del PSOE de cara a las próximas municipales para así arañarle un puñado de votos.

Si las elecciones del 22-M no estuvieran a la vuelta de la esquina, muy probablemente el comportamiento de PP, Podemos y Ciudadanos sería distinto. Pero, como digo, ante la inmediatez de las municipales el interés partidario está pesando más que el interés general.

Sea como fuere, llegar a las elecciones municipales -es decir, dos meses después de la celebración de las elecciones andaluzas- sin haber elegido presidenta y sin haber formado gobierno es, a mi juicio, una situación profundamente irresponsable y antidemocrática. Más aún, en el actual contexto de desafección. 

A los andaluces se les formuló una pregunta el 22-M y la respondieron democráticamente con su voto. Los andaluces, por tanto, ya han hablado. Ya han dicho lo que tenían que decir. Ahora es el turno de los partidos, que deben respetar la voluntad 'sagrada' que los andaluces han expresado en las urnas y trasladarla a las instituciones de gobierno de la Comunidad hasta hacer posible su normal funcionamiento. En eso consiste la democracia. No hacerlo es 'secuestrar' la voluntad de la ciudadanía andaluza por un interés partidario. Y esto es profundamente irresponsable y antidemocrático. Más aún, en el actual contexto de hartazgo y desafección.